Baliset

21 de agosto de 2010

Dune Vs Avatar

Aprovenchando el pronto reestreno de Avatar en cines, aprovecho para hacer algunas reflexiones sobre dicha película, y al mismo tiempo, comentar mis sensaciones durante el visionado de la misma.

A continuación, al igual que hice con la Guerra de las Galaxias, las 10 similitudes más impactantes:

- En lugar de encontrarnos en un planeta con un desierto desolador en el cual no durarás mucho sin un destiltraje (Arrakis), nos presentan uno con un bosque radioactivo donde no puedes vivir si no es con una mascarilla antigás. Como curiosidad aparte, decir que Pandora (el planeta de Avatar) se llama igual que planeta donde se desarrolla "El Incidente Jesús", de Frank Herbert.


- El mensaje principal, tanto en Dune como en Avatar es el mismo, es decir: la importancia del ecologismo y del equilibrio del ecosistema, e incluso tenemos dos personajes científicos capaces de entregar su vida por defender esos ideales (en Arrakis el ecólogo Liet Kynes y en Avatar la Dra. Grace).












- Temas como el ansia de poder, la expoliación y los intereses económicos de los poderosos aparece en ambas historias con personajes y facciones parecidas. Si bien esto forma parte de nuestra historia, es curioso el tratamiento tan similar que se da en ambos productos














- El desprecio por las demás razas, consideradas siempre inferiores, sean sucios y malolientes Fremen de escleróticas azules, o altos seres con cola y piel azul (curiosamente se copiaron hasta en el color azul).









- La figura mesiánica que viene de otro mundo y renuncia a su propia gente para unirse a los bárbaros autóctonos enamorándose de una nativa (en Dune Paul Muad’Dib; en Avatar Jake Sully).

































- Ambos planetas poseen la carísima y poderosa materia prima que mueve los mundos conocidos: en Dune es la melange, la especia que prolonga la vida: en Pandora es el unobtanium o como se escriba, formando ambas substancias parte del ciclo vital del planeta y de gran valor.
























- Para llegar a ser uno de la tribu de los Fremen, deberás cabalgar un mortífero gusano, llamado Shai-hulud, para ganarte el respeto de la tribu de los Na'vi tienes que aprender a volar sobreun pajarraco llamado Toruk. Si es que hasta en el nombre podemos encontrar similitudes.




































- El desenlace llega a través de una guerra de guerrillas (a la que se han unido todas las tribus del planeta): los que conocen el territorio con su armamento casi artesanal (Fremen en Dune; Na'vi en Avatar), frente a la tecnología puntera de los conquistadores (Sardaukar en Dune; militares en Avatar).




































- Ambos héroes acabarán heredando el liderazgo de la tribu y haciéndose con el planeta entero.




- Hay danzas rituales (como la orgía de los Fremen), memoria colectiva (como la que tienen las Bene Gesserit), sacerdotisas (o Reverendas Madres), y otros elementos más que parecidos.
































En resumen, Avatar es un maravilloso espectáculo visual que entrega a las nuevas generaciones un destilado de la extraordinaria historia creada hace cuarenta y cinco años por Frank Herbert.









Así pues, podemos decir sin miedo alguno, que Avatar es una copia paso por paso de Dune, pero mala.





Quizá anime a más de uno a leer aquella saga inolvidable e ir más allá de las referencias que puedan recordar a Matrix, Distrito 9, Bailando con Lobos o incluso y en mayor medida, a Pocahontas.

2 comentarios:

Neiban dijo...

Me ha gustado mucho el artículo. Todo lo que sea echar pestes de Avatar me encanta, a ver si la gente espabila y no flipa tanto con las mierdas que nos traen a los cines, por mucho efectito especial o 3D que tenga.

Mondarina dijo...

Es que Avatar copia de todo y más.